Quinta entrega de nuestra serie centrada en carreteras españolas con mucha historia. En este caso, volvemos a una radial, la N-I o carretera de de Madrid a Irún. Actualmente se conoce mejor como A-1 o Autovía del Norte.
Volvemos a las carreteras radiales, como hemos hecho anteriormente en entregas dedicadas a la N-III (N-3, o Carretera de Valencia) o a la “Carretera de Andalucía”, nombre con el que se conocía la N-IV. En esta ocasión le toca el turno a la N-I, la carretera que unía Madrid con Irún, finalizando en Behobia, junto a la frontera con Francia. Atravesaba Aranda de Duero, Burgos, Miranda de Ebro, Vitoria y Alsasua.
En la actualidad consta de 454 kilómetros. Precisamente a partir de este kilómetro, y a pesar de tratarse del mismo trazado, se denomina de otras formas: GI-11 y GI-20, en las inmediaciones de San Sebastián, y GI-636, entre Pasajes, Rentería, Irún y la frontera francesa. La N-I se desdobla en los tramos Madrid-Rubena (Burgos), y Miranda de Ebro/Armiñón-Lasarte-Oria, bautizada como Autovía del Norte. Sin embargo, en Guipúzcoa continúa siendo N-I. Y en Burgos.
Los 70 kilómetros más peligrosos de España, en Burgos
La conducción por las carreteras históricas de España no es siempre idílica. Sus defensores lo hacen teniendo en cuenta, como no puede ser de otra forma, la necesidad de seguridad. Por eso, el hecho de que exista una Plataforma de Afectados por la N-1 no es una buena noticia para esta carretera, ni para la Seguridad Vial en general. Desde el año 2002 han muerto, en estos 70 kilómetros, 117 personas, según publicó El País en 2017.
Y es que los 70 kilómetros que hay entre Burgos y Miranda están considerados los más peligrosos de España. La concentración de puntos negros con historial de accidentes -al menos tres al año- hace de ellos un “corredor de la muerte”, según lleva años denunciando esta Plataforma.
Fue hace seis años cuando la Plataforma se manifestó por la liberalización de la autopista de peaje AP-1 (inaugurada en 1974 y paralela a la N-I, conectaba Burgos con Euskadi), con el fin de aliviar el tráfico en el tramo de la N-I que aún pasa por la provincia de Burgos. La liberalización se produjo, por fin, el pasado 30 de noviembre. Quedando libre para todos los usuarios a partir del 1 de diciembre.