ADA MÁS QUE ASISTENCIA

 
¿NECESITAS AYUDA?  
LLÁMANOS 915 193 300

Hielo negro en carretera: combátelo

“Black ice” o hielo negro es una expresión que en EE.UU. describe el hielo que se forma en las carreteras cuando la temperatura desciende por debajo de los cero grados. ¿Sabemos el peligro que supone este fenómeno al conducir?

Seguramente, no. En especial, si no estamos acostumbrados a conducir por carreteras de montaña, donde la humedad es alta. En países como Canadá si se pueden apreciar señales de tráfico que indican el peligro de las temperaturas bajo cero: es decir, el pavimento helado. El nombre de “black ice” o hielo negro se debe a que, al ser hielo transparente, se confunde con el firme de la carretera. Es, por así decir, invisible; a diferencia de la nevada, las capas de hielo gruesas o el aguanieve. 

Se trata de placas de hielo difíciles de ver, particularmente peligrosas en puentes. Si bien en general el riesgo de transitar una vía cubierta con esta capa de hielo estriba en que puede ser muy resbaladiza. La Dirección General de Tráfico (DGT) ya advierte de este fenómeno meteorológico que, en caso de despiste por parte del conductor, o de velocidad inadecuada, puede hacernos perder el control del volante. Con el peligro que ello conlleva.

¿Cuándo se forma el hielo negro? ¿Cómo podemos combatirlo?

coche paisaje montañoso nevado

Coche por carretera helada.

Se forma cuando las temperaturas son particularmente bajas, y la humedad es alta. Tanto el amanecer como el crepúsculo son los momentos propicios para la formación de este tipo de hielo, que se da igualmente en entornos montañosos (fenómeno conocido como hielo glaseado que cubre las rocas) o marinos.

Si notamos que vamos a conducir sobre hielo negro, esto es lo que hay que hacer:

  • Mantener una distancia de seguridad amplia, mucho más grande que la normal.
  • Desacelerar y conducir con suavidad, a una velocidad precavida.
  • Prestar atención a los equipos y máquinas quitanieves, con la consiguiente distancia de seguridad.
  • Extremar el cuidado en puentes, rampas, pasos elevados… porque tienden a registrar este fenómeno con mayor facilidad.
  • Activar control de estabilidad, y soltar el acelerador o los frenos, en caso de deslizamiento repentino, conduciendo en la dirección del derrape y enderezando el vehículo lo antes posible.
  • Si llevamos neumáticos de invierno, particularmente buenos para fijar la adherencia, mejor.

Los comentarios están cerrados.